Muchas veces cuando vamos a realizar algún viaje con desplazamiento recelamos mucho de las fotografías, suelen ser bastante mejores que lo que después te encuentras en la realidad, pero en este caso puede que pase incluso lo contrario. Si ya de por sí las fotografías entran muy mucho por los ojos, la realidad no es ni más ni menos que reforzar todo lo que se había visto.
Desde la llegada con la amabilidad y disposición total de José María, que en todo momento se mostró dispuesto a solventar cualquier incidencia que pudiese surgir. Las instalaciones excelentes, vivienda totalmente equipada, todo cuidado hasta el más mínimo detalle. Siempre hay miedo a ver qué y cómo te vas a encontrar el lugar alquilado, pero en este caso la limpieza es total y absoluta, desde los paños de cocina hasta las sábanas muy bien puestas encima de las camas. Aire acondicionado en todas las habitaciones que funcionan a la perfección, utensilios de cocina y baño. Y qué decir de la piscina, excelente mantenimiento. Todo ello acompañado de varios sitios de confort a lo largo del resto de la vivienda, con una maravillosa barbacoa incluida. Y si además lleváis alguna mascota como fue nuestro caso, podéis tener la tranquilidad que podrá corretear por todo el terreno de césped y piscina sin que haya el más mínimo riesgo de que le ocurra algo o pudiese salirse por algún lugar.
Maravillosa semana encontrándose uno como en casa. Sin lugar a dudas repetiremos esta magnífica experiencia.